El ajedrez, además de ser un pasatiempo, un juego y un deporte, es utilizado como herramienta educativa y de socialización. Muchas veces, tenemos la creencia de que es un deporte para gente inteligente, cuando la verdad es justo lo contrario: jugar ajedrez nos hace más brillantes.
A través del desarrollo de la memoria, la concentración y la estrategia, uno de los más grandes beneficios del ajedrez reside en su capacidad de combatir o prevenir algunas enfermedades mentales y trastornos, así como el desarrollo de pensamiento crítico. ¡Conoce más acerca de sus ventajas!
Entre los beneficios del ajedrez que están siendo estudiados este momento por los médicos, existen muchos que contemplan una influencia positiva sobre las enfermedades neurodegenerativas.
Se ha empezado a utilizar como tratamiento terapéutico para niños con trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) y con Síndrome de Down, pacientes con trastornos de pánico, trastornos psicóticos e incluso en el seguimiento de trastornos por consumo de sustancias, donde los estudiados han demostrado una gran mejoría al recibir entrenamiento cognitivo a través del ajedrez.
En términos de prevención, el cerebro es un músculo, por lo tanto, ejercitarlo jugando es uno de esos beneficios del ajedrez que no podemos pasar por alto. De los descubrimientos más reconocidos tenemos que, aquellas personas que juegan ajedrez con constancia a lo largo de su vida, poseen un cerebro mucho más capacitado para batallar contra el Alzheimer, la demencia y otras enfermedades de deterioro mental.
Otro de los grandes beneficios del ajedrez es que entrena el cerebro en diversas áreas a la vez, por lo que es ampliamente recomendado como una actividad educativa en las escuelas. La razón es que este juego fomenta el pensamiento crítico, la toma de decisiones, la resolución de problemas, la habilidad lectora y matemática, el lenguaje, la concentración y la memorización. Se ha comprobado que las personas que juegan ajedrez de forma sistemática elevan su coeficiente intelectual mucho más arriba del promedio.
Estos beneficios del ajedrez se deben, en gran parte, a que para jugarlo hace falta una actividad cerebral que no es muy usual: el uso de ambos hemisferios cerebrales por igual. En consecuencia, tanto la creatividad como el desarrollo crítico se ven entrenados y potenciados, ya que, además, jugar ajedrez fomenta el crecimiento de las estructuras neuronales implicadas en la recepción de estímulos.
El mayor de los beneficios del ajedrez es que puedes entrenar en casa, en el colegio, en el trabajo o en cualquier espacio donde desees potenciar tus capacidades lógicas e intelectuales mientras te relajas y diviertes. ¡Inténtalo!