Es bien sabido que el descanso es uno de los elementos más importantes dentro de la salud laboral, sin embargo, aunque unos buenos hábitos de sueño resultan esenciales para evitar el cansancio, no solo durmiendo podemos procurarlo. Es por eso que se ha generado una nueva tendencia alrededor de algo llamado “microdescansos”, y te explicamos todo a continuación.
Los japoneses lo llaman “inemuri”, que se traduce a “soñar estando presente”. En nuestra cultura, los microdescansos son cualquier actividad que rompa con la monotonía de las tareas físicas o mentales que se llevan a cabo en la jornada y que puedan agotar y, por lo tanto, desgastar la salud laboral de los empleados. Algunas de estas actividades puede ser:
- Servirse un café.
- Estirarse.
- Conversar.
- Mirar un vídeo.
- Responder mensajes.
O cualquier otra acción que no esté relacionada al trabajo y que cumpla con dos características específicas: debe ser breve (20 segundos pueden ser suficientes) y voluntaria. Generalmente, nuestra única pausa dentro de la jornada es la del almuerzo, pero incluir estos breaks a lo largo del día puede tener efectos poderosos.
Aunque los mayores beneficios son los relacionados a la salud laboral, con la práctica se ha hecho cada vez más notorio el aumento de la calidad de trabajo de quienes toman microdescansos.
Se ha comprobado que la concentración de los empleados aumenta con creces, mientras que el estrés disminuye. También cambia la forma en la que ven su labor, llenándose de energía y produciendo resultados mucho más eficientes. En términos de salud laboral, los microdescansos ayudan a evitar las lesiones típicas de permanecer en la misma posición por mucho tiempo, lo que se traduce en empleados sanos que trabajan mejor.
El área de salud laboral en la que más se ha aplicado esta técnica es en la de lesiones en las oficinas, ya que estirarse, caminar hacia la ventana, tomar un breve descanso fuera del cubículo o simplemente cambiar de posición es fundamental a la hora de evitar tensiones en el cuello, espalda y muñecas. Para esto es necesario hacer una pausa física, es decir, algo más que ver el teléfono.
Sin embargo, desvincularse mentalmente de las tareas profesionales es otra de las técnicas de salud laboral que resultan importantes para mantener a los empleados concentrados y productivos una vez que retoman sus actividades, ya que recrearse o hacer algo que puede parecer una pérdida de tiempo en sus jornadas regulares permite que se relajen y se desapeguen brevemente de sus responsabilidades.
Cuando de microdescansos se trata, la mayor preocupación de las empresas es que sus empleados pasen todo el día afuera o navegando por internet, sin embargo, programar los microdescansos es la mejor forma de asegurar la salud laboral de todos sin dejar trabajo atrás. La recomendación general de los médicos es que estas pausas ocurran cada 40min.
Un microdescanso no es, por supuesto, un momento para ver una serie o tomar una siesta de una hora. Si estás muy ocupado o solo te gusta mucho tu trabajo, hay algunos elementos que puedes incluir en tu rutina para obligarte a parar, como tener una botella de un litro de agua en tu escritorio. Esto te obligará a levantarte e ir al baño con cierta frecuencia, lo que implica tiempo lejos de la pantalla y un cambio de postura.
También puedes ver fijamente por la ventana sin concentrarte en nada durante un minuto, acción que obliga a tu cuerpo a relajarse, a tu mente a no pensar en nada y es bueno para tu vista y tu salud laboral.
Cada persona es distinta y las actividades que realiza también, por lo que los microdescansos deben responder a sus propias necesidades. Lo importante es mantener el cuerpo y la salud laboral atendida, así como la mente fresca para nuestra próxima explosión de productividad.